En los últimos 20 años, el área profesional relacionado con el diseño, arquitectura e ingeniería, ha sufrido una revolución tecnológica. Ello trajo las ventajas que todos conocemos del uso de ordenadores y programas informáticos al día a día de cualquier empresa sobre los métodos tradicionales de delineación (Planos hechos a mano en lápiz/tinta) Esto produjo tal productividad y eficiencia que permite a las empresas producir más y mejor. Ese cambio se ha vuelto a repetir con la entrada del BIM. No es un programa más que mejore el CAD, sino un cambio integral en el método de trabajo. Para demostrar el cambio tan sustancial que supone cambiar a BIM, os hemos recopilado las principales diferencias entre BIM y CAD.
Correlación de la información
Personalmente, este es uno de los motivos que más me atrajo a interesarme por BIM y abandonar completamente el CAD. CAD es un tablero de dibujo digital. Esto significa que la información que se ejecuta en dicho programa (los dibujos, anotaciones, etc) dependen única y exclusivamente del técnico, en que sean correctas. Dicho técnico, puede tener mucha experiencia y estar muy formado, pero eso no evita a que lo que dibuje en CAD sea erróneo, no esté coordinado con el resto de información (la planta no coincide con la sección, el valor de una tabla de superficies no se ha actualizado, etc)
Este problema, se soluciona radicalmente con el uso del BIM. Ya que si un técnico quiere dibujar un muro, por ejemplo, no se limita a dibujar dos líneas en sección (o más si queremos definir las capas) y en cada nueva vista, tiene que hacer el ejercicio mental de realizar la sección o alzado de dicho muro. Por el contrario, levanta un muro en BIM el cual tiene su geometría en 3D y contiene toda la información de ese muro (capas, transmitancia térmica, espesores, etc) El técnico construye virtualmente el muro y el programa es el que tiene que realizar la sección, alzado, detalle, extraer mediciones, etc
Por ello, siempre la información está coordinada en todo momento. Si alargamos ese muro, se actualiza en todas las vistas, los datos en las tablas de cantidades, la perspectiva en 3D, etc.
Trabajo en equipo simultáneamente
Profesionales, o incluso estudiantes, que tiene que trabajar en un mismo proyecto (del tipo que sea) a la vez, se habrán encontrado que es difícil trabajar todos a la vez. La mayoría de programas de CAD solo permiten tener a una persona editando un archivo a la vez. Esto obliga a tener que partir el proyecto por secciones, a veces incluso por planos, y vincularlos entre ellos. Esto se agiliza en gran medida por BIM, ya que permite centralizar todo el proyecto en un único archivo que múltiples técnicos puedan trabajar a la vez en dicho archivo. Además, permite la colaboración con agentes externos a la empresa (consultorías, clientes, proveedores, constructoras) de forma ágil y controlada. Evitando la necesidad de enviar y recibir archivos y crear confusión, retrabajos y errores.
Veracidad de la información
Este aspecto, está relacionado con el primer punto que hemos tratado sobre cómo funciona BIM. El técnico, construye virtualmente y el programa es el que extrae la información. Esto, además de evitar que exista información en el proyecto que no esté coordinado e incorrecto, evita que un técnico por error o negligencia trampee la información. Por ejemplo, el ancho de un pasillo tiene que ser 1 metro de ancho, y en la dimensión indica 0,96 metros. Por la razón que sea, el técnico modifica el texto de la cota y la cambia a 1 metro. Después, se olvida que lo ha modificado y cuando es el momento de construirlo, se descubre que el pasillo mide 0,96 y no es posible arreglarlo. En este caso, BIM nos asegura que nadie puede trampear la información. El texto de una cota, no se puede modificar. Siempre tiene que reflejar lo modelado.
Las ventajas de BIM sobre el CAD son interminables, por ello, os recomendamos explorar la metodología BIM en profundidad y echarle un vistazo a otras publicaciones sobre BIM en nuestra página web.
Alberto Fiqueroa