Relanzar la economía supondrá un reto para todas las organizaciones que deberán luchar por recobrar su productividad y competitividad, algo que se deberá conseguir sin poner en riesgo la salud de sus trabajadores. Durante el confinamiento, todas las compañías se han esforzado por seguir adelante. Muchas se han visto obligadas aprender aceleradamente cómo digitalizar su negocio y procesos y los equipos a teletrabajar. En general todos disponemos de la tecnología necesaria para mantener la maquinaria en marcha. Eso era lo más sencillo. ¿Pero qué pasará cuando nos planteemos volver a nuestro trabajo presencial? ¿Estamos preparados para afrontar esta nueva realidad en nuestras oficinas? ¿Cómo haremos que nuestros trabajadores se sientan seguros en su puesto de trabajo?
En los nuevos espacios de trabajo post-COVID el control de las infecciones debe ser nuestra prioridad. Los trabajadores no querrán volver a un espacio de trabajo que nos les aporte seguridad, y la mayoría están diseñados basándose en la densidad. Los espacios abiertos con zonas informales compartidas deberán ser modificados.
Al mismo tiempo, las medidas que tomemos para controlar la propagación del virus, no deben ser fijas, ya que eso puede perjudicar nuestro sentido de comunidad, creatividad y productividad.
Nosotros planteamos soluciones que afectan a todo el espacio de trabajo: materiales, tecnología, planificación del espacio, comportamientos y protocolos. También queremos ser prácticos, ofreciendo ideas que se puedan adoptar tanto ya, como en siguientes oleadas. El espacio de trabajo debe ser saludable, pero también resiliente y flexible para adaptarse a cualquier cambio que podamos vivir a futuro.
3 FASES: CAMBIOS INMEDIATOS, EL FUTURO CERCANO Y EL FUTURO LEJANO
- CAMBIOS INMEDIATOS: ADAPTAR
Para mantener las organizaciones funcionando a su capacidad media, la mayoría necesitarán ir incorporando a sus trabajadores en oleadas. Muchos querrán que regrese el 50% y deberán adaptar sus espacios rápidamente utilizando el sentido común y las directrices gubernamentales para que no se propague el virus.
- FUTURO CERCANO: RECONFIGURAR
Los espacios tendrán que ser reconfigurados para acomodar a todos los trabajadores manteniendo aún las distancias de seguridad. Las soluciones deberán ser muy flexibles de manera que puedan responder rápidamente a cualquier eventualidad
inesperada. Las soluciones deberán estar basadas en lo que hemos aprendido de los patógenos y de cómo se transmiten y se destruyen.
- FUTURO LEJANO: REINVENTAR
Existe la necesidad de no solo volver a donde estábamos, sino de ser resiliente, movernos hacia adelante y resaltar. La innovación, productividad y el crecimiento puede reforzarse gracias a espacios de trabajo diseñados para equilibrar
los diferentes modos de trabajo mientras que favorecen el bienestar de las personas. La oportunidad consiste en reinventar los espacios de trabajo de manera que sean completamente flexibles, para que puedan adaptarse a cualquier cambio al que nos enfrentemos.
LAS ESTRATEGIAS PARA ADAPTAR EL DISEÑO DE LOS ESPACIOS DE TRABAJO DE MANERA INMEDIATA:
- DENSIDAD: El número de personas por metro cuadrado.
- GEOMETRÍA: Cómo está situado el mobiliario.
- DIVISIÓN: Pantallas, paneles y barreras.
- Espacios de trabajo individuales. Los límites alrededor del espacio de trabajo individual aumentan la privacidad y reducen la exposición a los pasillos y a otros espacios de circulación.
- Archivo. Las soluciones de archivo favorecen mucho la división y el distanciamiento para proporcionar la separación y el confort psicológico necesarios.
- Paneles. Las pantallas móviles que limitan espacios protegen el espacio personal y reducen la exposición.
- Superficies fáciles de limpiar. El uso de materiales fáciles de limpiar en el espacio de trabajo hace que sea fácil mantenerlo limpio en todo momento.
- Distancias de seguridad. Los espacios de trabajo individual han sido separados para proporcionar dos metros de espacio personal entre usuarios.
EL IMPORTANTE PAPEL DE LA TECNOLOGÍA
Ya comentábamos en otras entradas la importante labor de digitalización que se ha llevado a cabo en las empresas para poder continuar trabajando de forma remota durante la época de mayor virulencia del COVID.
En el momento en el que se comience a activar la actividad presencial en las oficinas, la tecnología seguirá teniendo un papel fundamental para controlar los accesos a las instalaciones de una forma segura, limitar aforos en los establecimientos de cara al público cumpliendo las normativas marcadas por la ley, facilitar elementos de higiene y protección en comercios y empresas, así como equipar y adaptar las salas de reuniones con la tecnología necesaria para facilitar la comunicación remota entre trabajadores, proveedores y clientes.
Existen multitud de soluciones tecnológicas que pueden ayudarnos en la adaptación de nuestras instalaciones a la vuelta al trabajo presencial como son:
- Dispensadores automáticos de gel hidroalcoholico con cartelería digital
- Cartelería digital como canal de información
- Control de acceso vía facial y control de temperatura
- Videoconferencia y Audioconferencia para empresas
- Adaptación de espacios formativos para realizar clases ONLINE
- Sistemas de Control de Aforos
- Cámaras termográficas